Seguro que alguna vez ha oído hablar de la uveítis, pero no sabe exactamente qué tipo de patología es ni qué síntomas presenta. La respuesta a sus dudas es muy sencilla: la uveítis es una inflamación ocular, en concreto, de la capa media, que se denomina úvea.
¿Qué causa la uveítis?
Esta patología es ocasionada por diferentes factores como enfermedades infecciosas, por ejemplo, la toxoplasmosis, pero también, puede estar provocada por enfermedades reumáticas y autoinmunes, como en el caso del síndrome de Behçet o la sarcoidosis, ambas patologías tienen como síntomas la inflamación ocular. A pesar de existir causantes claros de la uveítis, se calcula que un 50% de las personas que la padecen no se le encuentra el motivo por el que ha aparecido. Además, esta inflamación es la tercera causa de ceguera en pacientes de entre 20 y 50 años, por este motivo es esencial que reconozca los primeros síntomas de la uveítis para ponerse en manos de especialistas lo antes posible.
¿Cómo reconocer que se padece una inflamación de la úvea? Síntomas y pruebas diagnósticas
Como hemos mencionado, es imprescindible para su salud ocular que se conozcan los síntomas de estar padeciendo una inflamación de la úvea. Si experimenta alguna de las siguientes molestias, acuda a su centro de oftalmología de confianza para descartar que esté sufriendo un episodio de uveítis:
- Enrojecimiento ocular.
- Dolor en los ojos.
- Sensibilidad e intolerancia a la luz.
- Visión borrosa.
- Percepción de puntos en el campo de visión, lo que llamamos moscas volantes.
Una vez reconozca los síntomas y se haya puesto en manos de un oftalmólogo, este profesional le hará una serie de pruebas diagnósticas para confirmar que lo que le está pasando es, en efecto, una inflamación de su úvea, entre ellas podría realizarle las siguientes:
- Realizarle un test de agudeza visual: este es esencial para comprobar si su visión está afectada a causa de la uveítis y es fundamental que se haga en cada visita para monitorizar si el tratamiento está funcionando de manera correcta.
- Analizar su ojo con una lámpara de hendidura: se hace con un microscopio en el que se observa si hay presencia de células inflamatorias en los fluidos intraoculares y se hará una evaluación del estado de la zona en la que se encuentra la retina y el nervio óptico.
- Tomarle la presión intraocular en ambos ojos: esta prueba es importante, por el hecho de que algunos casos de uveítis vienen acompañadas de la hipertensión intraocular, que puede generar una pérdida de visión a largo plazo.
En AIO recomendamos que, aunque no tenga ningún síntoma, se haga revisiones oftalmológicas periódicas para descartar y prevenir posibles episodios de uveítis. Nuestros especialistas le harán todas las pruebas necesarias y le recomendarán los mejores tratamientos para curarla y evitar posibles complicaciones graves causadas por esta patología.