El sistema visual se va desarrollando incluso después del nacimiento, un niño al nacer tiene una visión prácticamente nula y no alcanzará la visión del 100% hasta los 6 años de edad aproximadamente. De aquí la importancia de hacer revisiones oftalmológicas antes de esta edad ya que algunas alteraciones visuales si no se diagnostican precozmente podrán ser para toda la vida.
¿Cuándo ir al Oftalmólogo?
Durante el primer mes de vida para descartar anomalías congénitas como: glaucoma, catarata, malformaciones, tumores, estrabismo, caída del párpado, etc. A los 3-4 años para una primera exploración completa y descartar la existencia de ojo vago, estrabismo, defectos de refracción y otras patologías.
Un mal funcionamiento del sistema visual producirá incomodidad al niño al fijar la vista, dificultará la lectura y se traducirá en un abandono de las tareas de visión próxima. Esto a la larga puede comportar un fracaso escolar.
¿Qué es ambliopía u ojo vago?
La ambliopía u “ojo vago” consiste en la disminución de visión de uno o ambos ojos, por falta de estimulación correcta, en el período de desarrollo visual. Por tanto, se origina en la infancia y si no es diagnosticada y tratada antes de los 7-8 años de edad podrá generar una disminución de la agudeza visual irreversible. Suele pasar desapercibida a los padres ya que muchas veces es asintomática. Afecta a un 4% de niños y es curable si se diagnostica y trata precozmente.
Las causas más frecuentes son: el estrabismo, los defectos de refracción no corregidos o la existencia de patologías como la catarata congénita.
El tratamiento consiste en corregir la causa que lo produce y estimular la visión del ojo vago, normalmente mediante oclusión del ojo sano.
¿Qué es el estrabismo?
Es la desviación anormal de un ojo o los dos en alguna de las posiciones de mirada. La desviación puede ser horizontal (cuando desvía el ojo para adentro o para afuera) o vertical (cuando desvía para arriba o para abajo). También puede ser intermitente (sólo se manifiesta en determinadas circunstancias) o constante.
Las causas pueden ser:
· Mal control por parte del cerebro
· Secundario a defectos de refracción
· Tumores, enfermedades del sistema nervioso, etc.
El tratamiento depende de la causa que lo haya originado y del tipo de estrabismo. Se realizará con corrección del defecto refractivo (gafas, o lentes de contacto), con corrección de la ambliopía (oclusión o terapia visual) y en algunos casos será necesario recurrir a la cirugía.
¿Qué es la obstrucción lagrimal?
Normalmente la lágrima lubrica la superficie del ojo y se drena por los puntos lagrimales hacia la nariz.
Cuando el trayecto de la lágrima desde el ojo hacía la nariz está obstruido hablamos de obstrucción lagrimal. En el niño se manifiesta por la existencia de lagrimeo y legañas desde el nacimiento.
El tratamiento en el 90% de los casos se soluciona espontáneamente antes del año de edad con masajes sobre la zona obstruida.
Si al año de edad no se ha solucionado será necesario recanalizar la vía lagrimal mediante un sondaje de la misma.
¿Qué es la catarata congénita?
Es la opacidad del cristalino, que es la lente fisiológica interna del globo ocular, impidiendo el paso correcto de la luz al interior del ojo y a la retina.
Se produce por una anomalía en el desarrollo embrionario o bien por alguna patología del embarazo como la rubeola.
El tratamiento es quirúrgico y depende del grado de afectación (opacidad) del cristalino y de la deprivación visual que provoque en el niño.
¿Qué son los defectos de refracción?
Se producen cuando las imágenes no se enfocan correctamente en la retina, esto hace que se vean borrosas o distorsionadas.
Los defectos de refracción son: la miopía, la hipermetropía y el astigmatismo.
Miopía:
Los rayos paralelos convergen en un punto situado por delante de la retina. Se manifiesta con una visión borrosa de lejos. Son niños que al tener una visión lejana reducida pueden mostrar un cierto miedo o retraimiento a los juegos en grupo.
Hipermetropía:
Los rayos paralelos convergen en un punto situado por detrás de la retina. Se manifiesta con cansancio al leer o al realizar trabajos de visión próxima, pesadez de ojos, dolor de cabeza y dificultad para la concentración.
Astigmatismo:
Los rayos paralelos no son enfocados en un mismo punto. Habitualmente está asociado a miopía o hipermetropía. Si el astigmatismo es alto se verán las cosas distorsionadas o inclinadas, también son frecuentes el cansancio ocular y los episodios pasajeros de visión borrosa.
Existen otros tipos de enfermedades a esta edad, pero que por su poca frecuencia se escapan a este artículo, no siendo por ello menos importantes. Si quiere que le hagamos una revisión periódica a su hijo/a, o quiere que le hagamos un diagnóstico precoz, acuda a nuestra clínica de oftalmología y póngase en manos de nuestros expertos en oftalmología infantil. ¡Contacte con nosotros y mantenga en perfecto estado la salud de los ojos de su pequeño de casa!