oftalmología infantil

La importancia de la oftalmología infantil

Durante la etapa de crecimiento, la revisión de los ojos es primordial para garantizar una óptima salud en un futuro.
El sistema visual se va desarrollando incluso después del nacimiento, un niño al nacer tiene una visión prácticamente nula y no alcanzará la visión al 100% hasta los 6 años de edad aproximadamente.

De aquí la importancia de hacer revisiones oftalmológicas antes de esta edad, ya que algunas alteraciones visuales si no se diagnostican precozmente podrán ser para toda la vida. En AIO tenemos un servicio de oftalmología infantil que cuenta con más de dos décadas de experiencia.

¿Cuándo ir al oftalmólogo?

Durante el primer mes de vida para descartar anomalías congénitas como: glaucoma, catarata, malformaciones, tumores, estrabismo, caída del párpado, etc. A los 3-4 años para una primera exploración completa y descartar la existencia de ojo vago, estrabismo, defectos de refracción y otras patologías. Es a partir de los 8 años cuando se podrán estudiar habilidades de percepción en caso de ser necesario.

Un mal funcionamiento del sistema visual producirá incomodidad al niño al fijar la vista, dificultará la lectura y se traducirá en un abandono de las tareas de visión próxima. Esto a la larga puede comportar un fracaso escolar.

Por ello, la ayuda de un profesional es primordial para conseguir una buena salud oftalmológica, aunque también es muy importante la educación y los cuidados del día a día con los más pequeños de casa. Como especialistas en oftalmología infantil, queremos darle algunos tips para cuidar la visión y los ojos de tu hijo/a. ¡Tome nota!

 

Consejos para una buena salud oftalmológica en pequeños

    • Tener una alimentación rica en vitaminas, sobre todo, la A, B y E. También de minerales, como el zinc y el selenio, u Omega 3.
    • Usar protección para proteger los ojos de la exposición del sol. Existen gafas homologadas para niños.
    • Evitar la exposición excesiva de pantallas electrónicas, como tablets, ordenadores, móviles, etc.
    • En el momento de jugar, hacer los deberes, dibujar o cualquier tarea que requiera un esfuerzo en los ojos, contar con una buena luz es primordial.
    • Hacer descansos visuales durante unos segundos de manera repetida durante el día.
    • Educar a que hagan los deberes u otras tareas sin acercarse demasiado al papel.
    • Tener una buena higiene de manos, para que los ojos no sufran infecciones.
    • Realizar actividades al aire libre. Hay estudios que afirman que llevar a cabo actividades al aire libre ayuda a que haya un 2 % menos de posibilidades de sufrir miopía.

¿Quiere que tus hijos estén en las mejores manos? En AIO nos preocupamos por la salud ocular de los más pequeños, por lo que los acompañamos en todas las etapas de crecimiento, revisando su desarrollo visual.

Puede ponerse en contacto con nosotros y concertar una visita, para que nuestros profesionales puedan hacerle una revisión, o bien, diagnosticar la patología que puedan estar sufriendo.